Diversidad botánica y proyectos de conservación: ¿Dos mundos aparte o una relación inseparable?

Hofstede, Robert y Patricio Mena.

Proyecto Páramo (Universidad de Amsterdam/EcoCiencia/Instituto de Montaña), Quito, Ecuador.

e-mail: ecopar@uio.satnet.net


Resumen:

En la conservación y el manejo de un ecosistema amenazado hay un sinnúmero de actores, que incluyen campesinos, hacendados, políticos, empresas de agua, antropólogos, agrónomos y, también, botánicos. Si bien fueron los botánicos quienes al principio lograron evidenciar la importancia de los ecosistemas tropicales, en los esfuerzos actuales de conservarlos parece que la ciencia pura está muy lejos del trabajo día a día. La razón para esto puede ser que en los proyectos tradicionales de conservación y desarrollo, se ha puesto más atención en asuntos socioeconómicos, agrícolas y políticos que en aquellos técnicos-científicos. Para muchos, los datos básicos sobre diversidad y las soluciones actuales para su conservación parecen dos mundos aparte. En el mundo de la botánica no hay que explicar la importancia de conocimiento de la diversidad. Sin embargo, falta la aplicación directa de este conocimiento en las actividades de conservación. Las botánica puede colaborar más directamente con proyectos de conservación mediante la valorización de su conocimiento: la diversidad es un insumo importante para priorizar áreas y acciones, para la concienciación de los actores (desde el campesino hasta la ciudadanía en general) y para tener bases de alternativas sustentables (plantas medicinales, árboles nativos, etc.). Lo que se debe hacer para que la diversidad y el manejo tengan una relación inseparable y fértil es buscar activamente la participación de botánicos dentro de los proyectos de conservación (y desarrollo), aprender a escuchar lo que la sociedad nos pregunta y adecuar la investigación y la educación hacia la aplicación del conocimiento sobre la diversidad.